Por Gladys Buitrago de Amaya, presidenta del Movimiento Unidos Somos Colombia para NOVA
Son numerosas las especulaciones de carácter político que se han venido generando en los últimos días del caótico 2020 sobre las elecciones presidenciales del año 2022.
En estos momentos Colombia se encuentra políticamente en un momento crucial. De ahí que las elecciones del 22 preocupen tanto, ya que en la mayoría de los colombianos se siente de manera palpable, la inquietud sobre lo decisivas que serán para el futuro de la nación.
La última encuesta presentada por la empresa Invamer a la fecha 26 de noviembre, que se basó en el conocimiento sobre hechos de actualidad principalmente con el avance y la percepción acerca del Covid-19, ha dado como resultado un primer lugar para Gustavo Petro del partido Colombia Humana, con un respaldo del 25,9 por ciento seguido por Sergio Fajardo del Movimiento Compromiso Ciudadano, con un apoyo del 20,5 por ciento y un tercer lugar para la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, quien tiene un 18,7 por ciento de intención de voto, si las elecciones se realizarán.
Desde la orilla denominada “centro-derecha” los dos precandidatos, no oficiales, más cercanos al corazón del ex presidente Alvaro Uribe, líder reconocido nacional e internacionalmente están Carlos Holmes Trujillo y Rafael Nieto, quienes no registran por el momento, intención de voto significativa. Esa intención de voto que favorece a Petro y a Fajardo en esta última encuesta, no es lo que más debe preocupar al país, sino el hecho de que todavía no es visible el candidato que logre cambiar esa tendencia hacia la izquierda en el 2022, espacio de tiempo que es ya de por sí, bastante corto.
El reto es proponer un candidato con un potencial capaz de neutralizar “la amenaza socialista”. No podemos ignorar que el Gobierno de Cuba y el Foro de Sao Paulo, tienen sus ojos fijos en Colombia, donde desean implantar una dictadura al estilo Hugo Chávez - Nicolás Maduro, afirma la politóloga guatemalteca Gloria Álvarez Cross.
Como dice Uribe, “Ojo con el 22”, que es lo mismo que “Ojo con la izquierda”. Porque hay unión y reman para el mismo lado. Con base en lo anterior, es muy importante tener en cuenta el que toma fuerza la propuesta de Humberto de la Calle, sobre una coalición de centro-izquierda que en el 2022 participe en las presidenciales con un programa compartido y un candidato único, idea que Gustavo Petro y Jorge Enrique Robledo ya aceptaron y a la que se le suman los precandidatos de la Alianza Verde: Iván Marulanda, Camilo Romero, Ángela María Robledo y Antonio Sanguino, Uno de ellos, iría a la consulta que propone De la Calle.
El sector privado se ubica a la derecha, aunque algunos ya piensan en sumarse a la tendencia del centro, lugar bastante inestable en el que la mayoría de los candidatos de izquierda se quieren colocar, “para sacar el pie a conveniencia” y así tener contentos a sus engañados electores, pisando unas veces hacia la izquierda y otras veces hacia la derecha.
Desde nuestra orilla queremos lo mejor para Colombia. Consideramos que se necesita imprescindiblemente crear y fortalecer las instituciones jurídicas del Estado y las políticas públicas fundamentales, que permitan garantizar un desarrollo humano ético, solidario, equitativo, justo, económicamente sustentable y ecológicamente sostenible.