Según testimonios de allegados, la pareja estaba en proceso de divorcio y atravesaba conflictos por la división de bienes. Amigos cercanos compartieron con María Eugenia en el distrito municipal de La Canela horas antes del suceso y aseguraron que, al despedirse, no imaginaron que sería la última vez que la verían.

El hallazgo de los cuerpos dentro de la vivienda, que quedó completamente destruida por las llamas, generó diversas conjeturas.

Juan Carlos González Peña, amigo de la pareja, señaló que ambos vivían separados y expresó su incertidumbre sobre cómo terminaron juntos en la misma casa. No descartó la posibilidad de que Porfirio haya obligado a María Eugenia a regresar, lo que refuerza la hipótesis de un posible homicidio seguido de suicidio.

Además, González Peña mencionó que la disputa por un terreno agravó las tensiones entre ellos. Mientras María Eugenia exigía su parte, Porfirio se resistía a la separación, con la esperanza de una reconciliación.

Las autoridades se encuentran investigando el caso para esclarecer los hechos. Los cuerpos calcinados fueron trasladados al Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Santiago (Inacif), donde se les realizarán los estudios correspondientes para confirmar su identidad y determinar las causas exactas del incendio.